Cada vez más vemos adultos utilizando brackets: se estima que en torno a un 6-7% de los adultos están empezando a hacer uso de tratamientos de ortodoncia. ¿Te surgen preguntas sobre brackets? Tipos de modelos, ventajas, duración de uso… encuentra todo lo que necesitas saber aquí!
Como en el caso de los niños, los brackets en adultos tienen como fin corregir el alineamiento de los dientes, ya sea por estética o por problemas médicos. Generalmente, son utilizados para gente con dientes mal posicionados, anormalidades, cuando no hay suficiente espacio o cuando los dientes se solapan.
Muchos de estos adultos eligen los brackets para poder lucir una sonrisa más bonita, y poner fin a un problema mayor. También supone una oportunidad para mejorar la confianza en uno mismo, e incluso en algunos casos mejorar las habilidades de comunicación.
Mas allá del aspecto estético, muchos de los problemas pueden resultar fruto de la mala posición dental, causados por: masticado, deglución, pronunciación, respiración, ronquidos, o incluso problemas musculares como el bruxismo o temblor de los dientes. El uso de brackets ayuda en consecuencia a tratar estos problemas.
Hay distintos tipos de brackets en adultos:
Más bien conocidos como brackets tradicionales, cuya eficacia ha sido probada y lo más económicos en el mercado. Su principal desventaja reside en que son mucho más visibles que cualquiera de los otros tipos, y en algunas ocasiones puede ser incómodo.
Una versión más discreta que los brackets metálicos. Estos brackets de cerámica tienen un color similar al de los dientes, lo cual los hace casi invisibles. Aun siendo igual de efectivos que los brackets tradicionales, son más caros y frágiles.
La revolución de los últimos años en materia de tratamientos de ortodoncia, los brackets transparentes para adultos son casi invisibles para el ojo y extraíbles. La única desventaja es que esta generación de brackets no son válidos para tratar casos complejos.
Se tratan de brackets convencionales que se posicionan en la parte interior del diente, haciéndolos invisibles en la cara exterior del diente. Aunque, este tipo de brackets son más caros y generalmente más incómodos que los otros mencionados.
La duración del periodo de tiempo para recolocar los dientes, depende de multitud de factores: complejidad del problema, tipo de brackets utilizados, la diligencia individual en el caso de los extraíbles, etc.
No obstante, el tiempo estimado de uso es de 6 a 8 meses para los casos simples, y hasta 24 meses para los casos más complejos.
En todos los casos, llevar brackets en adultos requiere una excelente higiene oral . Por lo cual, recomendamos el cepillado con una pasta fluorada y el uso de enjuague bucal dos veces al día, así como cepillos de dientes interdentales.